lunes, 28 de enero de 2013

Traslado de La santa casa de Nazaret a Loreto XXVIII

He tenido a menudo la visión del traslado de la santa casa de Nazaret a Loreto. Yo no lo podía creer, a pesar de haberlo visto repetidas veces en visión. 

La he visto llevada por siete ángeles, que flotaban sobre el mar con ella. No tenía suelo, pero había en lugar del suelo un cimiento de luz y de claridad. De ambos lados tenía como asas. Tres ángeles la sostenían de un lado; otros tres del otro, llevándola por los aires. Uno de los ángeles volaba delante arrojando una gran estela de luz y de resplandor. 

Recuerdo haber visto que se llevaba a Europa la parte posterior de la casa, con el hogar y la chimenea, con el altar del Apóstol y con la pequeña ventana. Me parece, cuando pienso en ello, que las demás partes de la casa estaban pegadas a esta parte y que quedaron así, casi en estado de caerse por sí solas. 

Veo en Loreto también la cruz que María usó en Éfeso: está hecha de varias clases de madera. Más tarde la poseyeron los Apóstoles. Muchos prodigios se obran por medio de esta cruz. 

Las paredes de la santa casa de Loreto son totalmente las mismas de Nazaret. Los tirantes que estaban debajo de la chimenea son los mismos. La imagen milagrosa de María está ahora sobre el altar de los Apóstoles.